La nueva generación de consolas ya está aquí. Sony y Microsoft vuelven a verse las caras en el campo de batalla del ocio en casa, mostrando sus nuevas armas que aspiran a conquistar los hogares de todo el mundo. La firma japonesa ya ha presentado oficialmente su PlayStation 5, después de meses de rumores y filtraciones. Microsoft tampoco ha perdido el tiempo, y ya ha mostrado también con todo detalle su Xbox Series, en dos versiones, la X y la S, para volver a recuperar el trono de las consolas de sobremesa. Ambos contendientes lucharán de forma encarnizada por llevarse el favor del público, seguramente con el salto de calidad más importante que hayamos vivido en los últimos veinte años en el sector, llevando los juegos a un nuevo nivel nunca antes visto.
La nueva consola de Sony ha llamado muchísimo la atención desde el primer momento por un cambio bestial en su diseño, y también por su enorme tamaño, uno de los temas más comentados desde su presentación oficial. Lo importante, asegura Sony, no es como luzca por fuera, sino lo que lleva dentro. La firma nipona se ha asegurado de que su consola cuenta con todos los adelantos gráficos posibles para marcar un hito en el entretenimiento familiar. Mayor capacidad, mayor potencia, mejores funcionalidades… La PlayStation 5 es una verdadera bestia tecnológica que, según la mayoría de expertos, se coloca por encima de la competencia en cuanto a fuerza bruta al menos. Habrá que esperar a tenerla en nuestras manos para comprobar si Sony cumple con todo lo que ha prometido, pero sin duda las expectativas están muy altas, y es que PlayStation 5 se puede convertir en una de esas consolas inolvidables que marquen a toda una generación.
Presentación técnica de la consola
La empresa japonesa ya confirmó hace meses que su nueva consola estaría disponible en 2020. Seguramente la epidemia del Covid19 haya retrasado sus planes iniciales, pero finalmente verá la luz antes de final de año, concretamente a mediados de noviembre, primero en Estados Unidos, Japón y algunos otros territorios americanos y oceánicos, y posteriormente en el resto del mundo. Esto se anunció en septiembre, cuando Sony por fin desveló todos los detalles de la consola, después de meses de filtraciones sobre su diseño, sus posibilidades y sus condiciones técnicas. La firma daba un golpe sobre la mesa y presentaba sus cartas para seguir liderando el sector del entretenimiento en casa con una consola que sobrepasa en potencia a cualquier otra que hayamos conocido. ¿Será eso suficiente para saciar a los jugadores?
Componentes más importantes de la consola
El diseño es una parte importantísima de una consola, pero a la vista está que para esta nueva generación, ni Sony ni Microsoft han puesto sus ojos especialmente en este concepto, concentrándose mucho más en conseguir un dispositivo tremendamente potente y a la altura de las expectativas, más que algo bonito. Los diseños han sido muy criticados, pero al final, lo realmente importante está en el interior, lo que hace mover esos juegos que se prometen tan impresionantes. Empezando por el cerebro de la máquina, la PlayStation 5 cuenta con un procesador Ryzen Zen, de la marca AMD, con ocho núcleos y dieciséis hilos, a una potencia variable de 3,5 Ghz. Comparable al de un ordenador de alta gama, será el punto base sobre el que se cimente toda la potencia bruta de la consola, acompañado de una memoria RAM de 16 Gb tipo GDDR6, un nuevo salto cualitativo que expande el ancho de banda hasta los 448 GB/s, una absoluta barbaridad.
Por supuesto, el otro gran componente indispensable en este tipo de consolas es la GPU, una verdadera bestia que cuenta con arquitectura AMD Radeon RDNA2, con una aceleración de hasta 2,23 GHz (10,3 TFLOPS) a través de la tecnología Ray Tracing, la más novedosa del mercado en estos momentos. El sistema lo completa un impresionante disco duro SSD de tipo NVIEM de 825 Gb para almacenamiento interno, que promete velocidades increíbles a la hora de disfrutar de los juegos, al ser mucho más potente y rápido que los SSD habituales, para los que también hay ranuras de expansión, por supuesto. Un buen sistema de sonido y un lector compatible con BluRay y DVD completan el total de componentes de esta imponente consola, tanto en potencia como en tamaño.
Diferencias con Playstation 4
En Sony han sabido que después de tantos años con una de sus consolas más vendidas debían dar un paso adelante sin titubeos y apostando por la potencia bruta. De ahí que la mayor diferencia con respecto a la PlayStation 4 sea esa mejora en la potencia de sus principales componentes. El hecho de aumentar también la memoria RAM o mejorar el disco duro para hacerlo más rápido supondrán también un salto cualitativo importante para la consola. Exteriormente, en cuanto a su diseño, el cambio es aun mayor, aunque no todos están contentos con eso, ya que consideran que la consola es demasiado grande y pesada, algo que no queda tan “estético” para ponerlo junto a la televisión. Sony también ha querido aclarar este punto, por supuesto.
¿Por qué Playstation 5 es tan grande?
Fue una de las cosas que más llamó la atención en la presentación de la consola. Era absolutamente gigantesca, si la comparábamos con las anteriores versiones de PlayStation, con incluso con su rival a batir, la Xbos Series. De hecho, hubo incluso memes sobre su tamaño y su peso, que no convencieron demasiado a la comunidad en un primer momento. Sony no dudó en salir al paso de las críticas, aludiendo al enorme ventilador de turbina que se ha colocado en el interior de la consola para mejorar sustancialmente su sistema de refrigeración y evitar así que el dispositivo se sobrecaliente. Es algo habitual en PCs de sobremesa, sobre todo en los más potentes, pero nunca antes lo habíamos visto de esta manera en una consola. Si es para mejorar el rendimiento, de todos modos, bienvenido sea ese ventilador.