Los hemos visto en cómics y en las últimas décadas también en el cine y en la televisión. Muchos de nosotros hemos soñado con tener sus fascinantes súper poderes y, por qué no decirlo, también su impresionante glamour. Pero en el mundo real no existen los superhéroes y (por desgracia para muchos) cuando hablamos de ellos lo hacemos para referirnos exclusivamente al fabuloso mundo de la ciencia ficción… ¿o quizá no?
Era cuestión de tiempo que con el paso de los años y en la época en la que vivimos alguna persona anónima decidiera enmascararse y ponerse un peculiar traje ceñido para materializar así su propia visión de un superhéroe. Lo que quizá no esperábamos era que estos superhéroes de la vida real llegasen a ser tan numerosos, pues ciertamente hay muchos más de los que nunca pudimos llegar a imaginar (se cuentan más de 200 casos), y algunos de ellos pueden llegar a resultarnos curiosamente deslumbrantes.
Qué son y cuáles son sus funciones como ‘superhéroes’
Al igual que en los cómics de Marvel o de DC, muchos de estos superhéroes combaten el crimen como bien lo haría el mismísimo Batman, algunos hacen patrullas nocturnas deseando encontrarse con algún malhechor que haga algo ilegal para entonces, con el sigilo y la destreza de un auténtico felino, poder acorralarle, abalanzarse sobre él y…dar parte a las autoridades. Y es que, como era de esperar, estos superhéroes no tienen la potestad de castigar a sus enemigos y atraparlos por su cuenta pues, evidentemente, no les está permitido tomarse la justicia por su mano. Sin embargo, esto no desalienta a muchos de ellos, quienes aún así intentan aportar su granito de arena para hacer de este un lugar mejor. Otros, en cambio, ignoran las leyes y sí que se toman la justicia por su mano, aunque esto les sirva únicamente para convertirse también ellos en auténticos criminales.
Por otro lado, muchos de estos héroes no son anónimos a pesar de ir disfrazados, y sus labores se centran en ayudar a los demás yendo a hospitales a visitar enfermos, efectuando labores que van en contra de la contaminación y todo tipo de actos que, si bien es cierto que no son demasiado temerarios, no dejan de tener su parte de heroicidad.
The Rain City Superhero Movement
El Movimiento de Superhéroes de Rain City se desarrolló en Seattle desde 2011 a 2014 y se trataba de un grupo formado por diferentes personajes disfrazados que intentaban ayudar a la policía (a pesar de que esta prefería que se mantuviesen al margen) a detener a toda clase de criminales y a evitar situaciones que pudieran desembocar en desgracia. Durante la existencia de este grupo sus integrantes llegaron a colaborar en la captura de un agresor sexual, de varios vándalos y ladrones de vehículos e incluso impedían que los conductores manejasen sus coches en estado de embriaguez.
Superbarrio Gómez
En México también cuentan con sus propios ‘superhéroes’. La otra identidad del activista social Marco Rascón Córdova es la de Superbarrio Gómez, quien ha afirmado en más de una entrevista que su objetivo principal es el de defender los derechos humanos especialmente de las personas pobres. Además, Superbarrio es ya una figura política reconocible en Ciudad de México, donde ha liderado diferentes manifestaciones y llevado a cabo un sinfín negociaciones con las autoridades.
Su aspecto es bastante reconocible, pues adapta la vestimenta de los combatiente de lucha libre mexicana, llegando incluso a ser comparado con el famoso luchador ‘El Santo’.
Entomo, el ‘hombre insecto’ de Nápoles
Aunque la mayor parte de estos superhéroes están concentrados en Estados Unidos, también podrás encontrarlos en Italia. En Nápoles, concretamente, tenemos el caso de Entomo, quien se ha autodenominado a sí mismo como ‘El hombre Insecto’ por sus increíbles reflejos. Sin embargo, como bien ha afirmado en alguna entrevista, Entomo no pretende sustituir a las autoridades, sino impedir crímenes más pequeños y evitar la mala actuación de los demás: ‘Combato el individualismo que se come al prójimo, combato a las personas que hacen el mal a pesar de poder evitarlo. Combato el consumismo y promuevo el ecologismo y el activismo’.
Spectre, el perfecto antagonista
Como era de esperar, si bien es cierto que existen personas que creen ser superhéroes de cómics también hay quienes adoptan el papel de villanos. El caso de Spectre es conocido especialmente en Estados Unidos. Aunque aparentemente su periodo de actividad parece haber llegado a su fin en 2009, su identidad sigue siendo totalmente desconocida. La información que podemos encontrar sobre él se encuentra especialmente en los periódicos americanos que van desde 1987 a 1999, sin embargo sabemos que sus crímenes solían ser a pequeña escala. No obstante la propia policía de Estados Unidos ha llegado a afirmar que tienen motivos de peso para crees que Spectre fue el cerebro criminal tras el famoso robo en el museo Isabella Stewart Gardner en 1990 y que las obras de arte desaparecidas siguen a día de hoy en su poder.